Las ánforas olearias Dressel 23 representan el comercio del aceite bético en época bajoimperial. Sustituyen al ánfora Dressel 20 a finales del s. III d.C., presumiblemente como una evolución tardía del ánfora Dressel 20 parva del pecio de Cabrera III fechado en ca. 257 d.C. (Berni 1998; Bost et al. 1992). A partir del s. IV ya se puede hablar plenamente de ánforas Dressel 23. Esta forma cuenta con numerosas variantes y se caracteriza por tener un cuerpo con perfil de limón, y por la pérdida de uniformidad en el modo de elaborar los bordes y enganchar las asas.
En la costa bética se han identificado hasta ahora las variantes Dressel 23A (Keay XIIIA), Dressel 23B (Keay XIIIB, Keay XIIBis), y Dressel 23D (Keay XIIIC, Keay XVIII). De todas ellas, es genuina de la costa bética, y más concretamente de la provincia de Málaga, la variante Dressel 23D.