Oberaden 74 (Tarraconensis northern coastal area)

La Oberaden 74 es un ánfora definida por primera vez por S. Loeschke en su estudio del material cerámico del campamento militar de Oberaden (Loeschcke, 1942, 76-80). No obstante, si bien la forma no aparece en la tabla tipológica de Dressel, sí que había sido reconocida con anterioridad al trabajo de Oberaden, y es el mismo Loeschke quien la incluye dentro de su forma 68 en el estudio del material de Haltern (Loeschke, 1909).

Fig.1.- Oberaden 74 completa de Oberaden (Loeschcke, 1942)	Fig. 2.- Oberaden 74 completa de Oberaden (Loeschcke, 1942)

Ha sido generalmente asimilada con la Dressel 28 a modo de una única tipología que sería Oberaden 74-Dressel 28, e incluso a día de hoy continúa efectuándose dicha asimilación, a pesar de que desde finales de los 70, si no incluso antes, hay autores que las separan tanto por su forma como por el tipo de pastas. Igual de problemática resulta la identificación entre Oberaden 74 y algunos tipos de ánforas galas de fondo plano, principalmente las Gauloise 2. Esta confusión nace de la propia publicación del material del campamento de Oberaden por parte de Loeschke, que es donde por primera ocasión aparece una clasificación de nuestra forma, con dibujos e imágenes. El autor alemán diferencia su forma 74 de la 75, a pesar de sus afinidades tipológicas y de que ambas comparten un tipo de labio muy similar. Sin embargo, posteriormente compara su forma 74 con un ejemplar procedente de Stahl (Renania-Palatinado) que en función del dibujo ha de ser incluido claramente dentro de las Gauloise 2 (Loeschke, 1942, 78).

La Oberaden 74 es un ánfora de base plana anular cóncava, cuerpo ovoide de pequeño tamaño, con asas cortas de doble acanaladura y sobre todo, se caracteriza por un cuello corto y un labio grueso con doble moldura (Miró, 1988). Se reconocen por una altura reducida (unos 65 cm), un cuerpo ovoide grande en comparación con la altura, borde de doble moldura y ligera acanaladura central, que varía entre 14-19 cm diámetro (figura 2). Las asas son planas pero gruesas, con doble acanaladura dorsal, y dentro de ser un ánfora de base plana, presenta un pie umbilicado y en ocasiones anillado, de un diámetro entre 13-18 cm (Etienne y Mayet, 2000, 131). Aún así, debido a los diferentes centros productores y a las distintas etapas cronológicas, parecen adivinarse pequeñas diferenciaciones formales.

Creemos conveniente destacar que las ánforas de base plana se muestran adecuadas para el transporte fluvial y también terrestre, pues se adaptan mejor a las barcas y barcazas de río de poco tamaño. Por el contrario, no se muestran muy útiles para el transporte marítimo, ya que la ausencia de pivotes no permite fijarlas bien a la bodega de la nave.