Time interval

Aunque de forma genérica la manufactura de Dressel 2-4 se desarrolla entre la segunda mitad del s. I a.C. y mediados del s. II d.C. –fecha esta última que podría posponerse hasta el s. III d.C. para el caso de las Dressel 2-4 itálicas y orientales-, para el caso de las Dressel 2-4 béticas costeras se ha propuesto una producción datada entre época augustea y las primeras décadas de la siguiente centuria en la bahía de Algeciras (Bernal et alii, 2004), mientras que para la producción malagueña, ésta se produjo en momentos algo posteriores datados entre la segunda mitad del s. I d.C. y comienzos del s. II d.C.  Aunque las escasez de hallazgos por el momento sugiere prudencia al respecto, debiendo realizarse estudios monográficos al respecto en centros de consumo.

Origin

Se tiene aceptado por parte de la comunidad científica que las Dressel 2-4 comienzan a manufacturarse en los alfares itálicos de la Campania, el Lacio y Etruria como evolución formal de las Dressel 1. A partir de ahí arranca una intensa imitación de estos envases tanto en el Mediterráneo Oriental como en el Occidental, en donde destaca como foco de producción el área costera septentrional de la Tarraconense, o diversos puntos de la Gallia (Zevi, 1966; Tchernia y Villa, 1977; Dangreaux et alii, 1992; Martin-Kilcher, 1990 y 1992); llegando incluso a plantearse su modelado en talleres de Britannia (Castle, 1978; Hesnard, 1987).

En cuanto a la fabricación bética de este modelo se apuesta por dos áreas geográficas de producción, una en el curso medio del Valle del Guadalquivir con los talleres documentados de Guadalbaida y Alcalá del Río (García Vargas, 2010) y otra – analizada en esta ficha- en la costa, centrada en la bahía de Algeciras –donde destaca el taller de Villa Victoria en San Roque y quizás el de Guadarranque- y la costa malagueña –alfar de Manganeto-. En este último caso, la parquedad de la información publicada con respecto al análisis de las ánforas documentadas en esa intervención (Arteaga, 1985) provoca que apenas podamos extraer más información al respecto más allá de proponer un nuevo punto de fabricación de este ejemplar que había pasado desapercibido hasta ahora. De igual forma, en el estado actual de la investigación, la extensión de esta producción costera a la zona oriental mediterránea debe desecharse, al no haberse confirmado la fabricación de Dressel 2-4 en el taller de Loma de Ceres.