Dressel 8 (Baetica coast)

Typological evolution

Es de destacar la uniformidad morfológica y morfométrica de las Dressel 8, incluso en producciones que distan al menos cincuenta años y pese a ser producidas en las mismas figlinae y probablemente por los mismos alfareros que las Dressel 7, que se distinguen por su diversidad formal. Así, aunque ambos tipos tuvieran un origen común, las Dressel 8 se estandarizaron de tal manera que serían perfectamente identificables, no habiendo necesidad de recurrir para su clasificación a formas compuestas (Dressel 7-8) al menos en la Bahía de Cádiz.

Con todo, pueden señalarse ciertos criterios de diferenciación cronológica. Una primera serie de bordes se asemejaría a los de las Dressel 7B y C, más frecuentes en contextos augusteos. La segunda serie, con bordes de sección rectangular, es más frecuente a partir de época de Tiberio. No obstante, esta diferenciación no constituye un criterio estricto de datación. Las acanaladuras centrales son más frecuentes en las asas a partir de la mitad del siglo I d.C. Por su parte, los primeros pivotes fueron cilíndricos o troncocónicos, a veces con un ensanchamiento final marcado por un estrangulamiento de las paredes. Los más recientes son cónicos con el extremo redondeado.

Las primeras producciones de esta forma en la Bahía de Cádiz se situarían en la figlina de El Gallinero. En la Bahía de Algeciras se hallan en la fase I de la figlina de Villa Victoria, en momentos tardoaugusteos. La evolución formal sería similar en ambas bahías: las Dressel  7 se producirían desde época augustea antigua (Cerro de los Mártires-Gallineras y El Rinconcillo) introduciéndose las Dressel 8 en momentos tardoaugusteos o tiberianos. Pecios y centros de consumo avalarían esta propuesta, como se ha indicado supra.

En época agusteo-tiberiana las Dressel 8 muestran borde alto con moldura inferior a menudo en  forma de listón basal, y pivote con remate inferior bien con ruptura de líneas bien marcada.  Se caracterizan también por marcar al exterior el tránsito entre la pared lateral y la base del pivote, rasgo que se debilita en los ejemplares más tardíos, a partir de mediado del siglo I d. C.  En éstos ejemplares de la segunda mitad del siglo I d. C. es menos frecuente el listón basal del borde, reducido a menudo a un escalón de separación con el cuello, mientras que los pivotes presentan un fondo cónico de morfología peculiar que será el que “heredará” modificado la Beltrán IIA, siendo muy distinto del que llevan las ánforas contemporáneas de los tipos 7, 10 y 11 que pasará al tipo Beltrán IIB casi sin transformaciones.

Visual characteristics

Borde: Una primera serie de bordes, más moldurados, se asemejaría a los de las Dressel 7B y C, siendo frecuentes en contextos augusteos. La segunda serie, con bordes de sección triangular o subrectangular, es más frecuente a partir de época de Tiberio. No obstante, esta diferenciación no constituye un criterio estricto de datación. En general, para la época agusteo-tiberiana se hallan bordes altos de sección rectangular que como moldura de separación con el cuello llevan a menudo un listón basal. Para las producciones de la figlina de El Torno se cuenta con varios tercios superiores de ánforas que se clasifican como Dressel 8/9. Estos ejemplares estarían muy evolucionados a juzgar por la inclinación de 45 grados del borde, rematado en una pestaña colgante. Se conocen paralelos, aunque menos evolucionados, en distintas figlinae de las Bahía de Cádiz.

Cuello: muy cilíndrico y alto.

Asa perfil: largas; caen abruptamente desde la parte inferior del labio hacia los hombros, mostrando un profundo surco medial que ocupa habitualmente sólo el tercio superior del asa, detalle morfológico frecuente a partir de la mitad del siglo I d.C.

Asa sección: ovalada, con surco medial en la parte superior o completamente lisas.

Hombros: redondeados y marcando a veces una línea de carenación en la separación con  el cuerpo.

Cuerpo: ovoide con el máximo diámetro  normalmente en el centro.

Base: Los pivotes más antiguos fueron cilíndricos o troncocónicos, a veces con un ensanchamiento final marcado por un estrangulamiento de las paredes. Los más recientes son cilíndricos o ligeramente cónicos con el extremo redondeado. En época agusto-tiberiana se marca al exterior el tránsito entre la pared lateral y la base del pivote, rasgo que se debilita en los ejemplares más tardíos.