Las ánforas de tipo urceus están relativamente bien representadas en diferentes yacimientos arqueológicos situados a lo largo de la costa portuguesa (Aljube - Oporto; Monte Castêlo – Matosinhos) y gallega (Santa Tecla y Castro de Vigo – Pontevedra). Incluso parece que en zonas interiores, como sucede en el Castillo de Lousa (Mourão, Évora; Morais, 2007, 401-415; 2008, 281-313; 2010, 181-218) y en el NO, caso de Lugo (c/ Rodríguez Mourelo 6 y Solar de Simeón; Carreras y Morais, 2011, 46-47) y Astorga, donde se clasificó como Astorga 44 un envase de base plana del valle del Guadalquivir (Carreras y Berni, 2003). En la Baetica han sido ya identificados ejemplares en Sevilla (c/ "Alemanes" nº 7-9), por Enrique García Vargas, y en Cádiz (c/ Soledad), por Darío Bernal Casasola y María Luisa Lavado Florido (2012). Como se muestra en el pecio bético augusteo de Sud-Perduto 2 (Cabo Bonifácio), estas ánforas se han exportado más alá de la Península (Bernard, 2008, 461-471).
Como sus equivalentes galos – Gauloise 5 y 7 – se destinaban, muy probablemente, al transporte de productos vitivinícolas. Además de las características formales, los restos de resina en el interior de algunos ejemplares sugieren que non se han utilizado para el transporte de aceite (figura 2).
Figura 2.- Capacidades de las ánforas tipo urceus 2 (inédito) |