Tiene una amplia distribución por todo el Occidente romano, en las provincias mediterráneas de Hispania, Gallia e Italia (Beltrán, 1970; Panella, 1970). Dos pecios mediterráneos como Sud-Lavezzi 2 (Liou y Domergue, 1991) de época de Tiberio (figura 3) y Port-Vendres II (figura 4) de época de Claudio (Colls et alii, 1977), muestran sus rutas de exportación y cómo se transportaban como cargamentos secundarios de otros productos béticos. Se documenta en el valle medio del Ródano como en Saint-Romain-en-Gal o Lyon. Además presenta una buena distribución en el Atlántico, en lugares como Braga, Conimbriga, Tomar, Vila Franca de Xira, Ihla da Berlenga, Quinta do Rouxinol, Porto dos Cascos, Tróia o Sines -Lusitania- (Filipe, 2008), Lugo (Tarraconense), costa Norte de la Gallia como Caesaromagus o Amiens (Laubenheimer y Marliere, 2010) o en los campamentos del Rhin como Neuss, Nijmegen, Dangstetten, Xanten, Mainz, Köln o Augst -Germania Inferior, Superior y Raetia- (Ettlinger, 1977; Ehmig, 2007). De todas formas, se trata de un ánfora que alcanza estos mercados en cantidades sumamente reducidas, comparadas con otras ánforas béticas.
Figura 3.- Ejemplar completo de Dr. 28 procedente del pecio Sud Lavezzi 2 (Liou, 1991) | Figura 4.- Ejemplar completo de Dr. 28 procedente del pecio Port Vendres II (Colls et alii, 1977) |
En Baetica suele ser frecuente en los contextos excavados, pero también en porcentajes reducidos, como en las recientes excavaciones en la Plaza de la Encarnación de Sevilla (figura 5).
Figura 5.- Ejemplares de la Plaza de la Encarnación de Sevilla (Inédito) |
Desconocido, tal vez vino (García Vargas, 2004), deducido de la morfología del recipiente.